03 mayo 2007

Crépuscule

Hay dance, mod, beats, darks. Rock y house. No basta la cumbia. Aburre la electrónica. Entonces, cierto que el tango está bueno. Porque los abuelos siempre saben. Y de ellos: ginebra, ron, gin, whisky y añejo 8 hermanos. ¡Salud!. Pero tampoco. Entonces vinos, pero ni tintos ni blancos, espumantes, burbujeantes, energizantes. Y menos. Probemos las drogas: naturales, verdes, de hojas con y sin pinches. Cocinemos vivo a San Pedro. Tal vez hongos. Fríos, calientes, con agua, diluidos. Entonces cocaína, aspirina, bencina, y una oda al resto de las inas. Y con todo eso, a fuego moderado, cocinamos amores salpicados con decepciones, y a no olvidarse esa pizca de confusas emociones. De postre algún triunfo. O fracaso, que acá todo tiene el mismo gusto. Nada, nunca nada, parece alcanzar. Siempre, lejos siempre, la calma en la ciudad.