24 diciembre 2007

A pesar de algunas contradicciones navideñas, no puedo ser indiferente al deseo de desear. Ese que parece manifestarse medio bajito en algo así como "ojalá que", y aparece en un brindis, en un beso, aplastado como entre dos panes durante un abrazo. Esta vez lo pedí antes, en otro lado, a uno que tampoco existe. Lo que yo deseo es ......